La Luna es mucho más antigua de lo que los científicos creían

Según la teoría del gran impacto —la hipótesis más sólida por ahora—, la Luna se formó a partir de los restos fundidos de un planeta llamado Tea, que colisionó con la Tierra en los primeros etapas de su existencia. Se piensa que el evento tuvo lugar en un intervalo de entre 200 y 300 millones de años después de la formación del sistema solar. No obstante, los autores de un nuevo estudio publicado en la revista ‘Nature Geoscience’ afirman que ocurrió mucho más antes, durante de los primeros 50 millones de años del sistema solar.

Los especialistas lo hay concluido al descubrir que la proporción de los elementos hafnio (Hf) y wolframio (W) contenidos en los silicatos lunares —llevados a la Tierra por las expediciones Apolo de la NASA— es diferente de la que se observa en estos mismos minerales en nuestro planeta. En particular, W —precisamente, su isotopo 182W—, es allí más abundante, lo que puede atribuirse a la transformación del isotopo 182H en 182W.

Sin embargo, dada la inestabilidad del isótopo 182H, la transición debería haberse completado totalmente hacia los primeros 60 millones de años de vida del sistema solar. Por lo tanto, las rocas lunares debieron empezar a solidificarse antes de que nuestro sistema alcanzara los 50 millones de años.

“Esta información sobre la edad significa que cualquier impacto muy grande tuvo que ocurrir antes de esa fecha, lo que responde a una pregunta muy debatida entre la comunidad científica sobre cuándo se formó la Luna”, cita un comunicado de la Universidad de Colonia al doctor Carsten Münker, uno de los autores del estudio, publicado en la revista ‘Phys’.

El estudio de la edad de la Luna —cuerpo solar cuya formación probablemente posibilitó la creación de la vida— tiene una importancia esencial a la hora de comprender el pasado de nuestro planeta, destacan los científicos.

“Como la formación de la Luna fue el último gran evento planetario después de la formación de la Tierra, la edad de la Luna también nos ofrece una edad mínima para la Tierra”, explicó el líder del equipo, el doctor Maxwell Thiemens, también de la Universidad de Colonia.